El Estado Islámico se ha atribuido la autoría de un supuesto ataque contra un avión estadounidense A-10. Los terroristas aseguran haber derribado la aeronave al oeste de la ciudad siria de Markada, situada a unos 100 kilómetros al sur de Hasaka.
La información sobre el supuesto ataque ha sido difundida a través de la agencia Amaq, vinculada al EI. El Pentágono, por su parte, ha desmentido la noticia del derribo, informa Indrees Ali, corresponsal de Reuters, a través de su cuenta en Twitter.
Los yihadistas del EI hacen frente a una fuerte ofensiva antiterrorista con constantes ataques contra sus instalaciones lanzados tanto por parte de las fuerzas sirias, como por parte de la aviación rusa, así como por los aviones de la coalición internacional liderada por Estados Unidos.
Tras el ataque en Hassadjek lanzado por cazas belgas de la coalición liderada por EE.UU., que se saldó con seis heridos y cuatro muertos, los terroristas atacaron el miércoles las posiciones kurdas en el norte de Alepo.