El huracán Lane se debilitó mientras avanzaba hacia Hawai, pero la lista de calamidades que amenazan la vida sigue siendo fuerte.
El huracán fue degradado a una tormenta de categoría 3 ayer jueves, y posteriormente a categoría 2 el viernes, tras desencadenar lluvias torrenciales, inundaciones y deslizamientos de tierra en partes de la isla grande de Hawai, junto con olas peligrosas y fuertes vientos.
Si bien no está claro si las islas recibirán un impacto directo, el huracán traerá entre hoy viernes y mañana sábado “inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra significativos y potencialmente mortales”, dijo el Servicio Meteorológico de Estados Unidos.
Con información de CNN en español.