Richard Rojas, un veterano de la Marina estadounidense de 26 años, había sido detenido anteriormente en dos ocasiones por conducir borracho.
En su declaración a la Policía de Nueva York, Rojas, que se encuentra bajo custodia policial, no sólo aseguró que escuchó voces que le llevaron a arrollar a los transeúntes de la céntrica plaza neoyorquina, sino que además afirmó que él “esperaba morir”.
Times Square, en el corazón de Manhattan, una zona de teatros, cines y grandes tiendas con gigantescos carteles luminosos, es uno de los lugares más conocidos del mundo y atrae a diario a turistas de todas partes.
“Se suponía que me tenían que haber disparado. Yo quería matarlos”, dijo nada más ser arrestado.
El accidente ocurrió en el cruce de la calle 45 y la avenida Broadway. El automóvil, de color morado, quedó sobre dos ruedas, apoyado contra una columna y postes metálicos, y se incendió. Decenas de ambulancias, camiones de bomberos y coches policiales acudieron rápidamente al lugar y cercaron la zona del accidente.
Rojas es vecino del distrito del Bronx e intentó fugarse del lugar cuando ocurrió el accidente.
Las primeras hipótesis apuntan a que el ex militar estaba bajo los efectos de una droga conocida como K2, una marihuana sintética cuyos efectos pasan por elevar el estado de ánimo, mejorar la fuerza física y alterar la percepción de la realidad. Si se consume en grandes cantidad tiene efectos psicóticos, como paranoia o alucinaciones.
Las pruebas de alcohol dieron negativas, pero las de drogas dieron positivo. Al parecer, y según han relatado vecinos de Rojas, cuando regresó de la Marina tuvo problemas con el alcohol. Había sido arrestado el mes pasado por amenazar a un hombre con un cuchillo yen 2015 y 2008 por conducir borracho. Además, en 2013 pasó dos meses preso en un cárcel militar en Carolina del Sur.
Elmundo.es