Hace 10 años que la Escuela Popular El Cántaro es el centro donde niños de Aregúa y alrededores aprenden y juegan. Actualmente cuenta con unos 300 estudiantes y ofrece talleres de oficio y conciencia al medioambiente, relató Joe Giménez fundadora de la institución benéfica.
Al principio alquilaban una casa para reunir a los niños. Pero hace cinco años, cuando subió el costo del alquiler no tuvieron opción más que salir y buscar otro lugar para instalar la escuela. Allí fue donde Joe junto a su esposo y el primer profesor de institución, decidieron tomar la iniciativa de construir un local propio.
“La escuela se construyó en base a la bioconstrucción comunitaria, está construida de adobe por sus propios alumnos, abuelos, padres”, destacó Giménez explicando que aprovecharon los conocimientos de los aregüeños en alfarería y construcción con adobe, para tomar la iniciativa y levantar una escuela en base a elementos orgánicos.
En la institución los niños y jóvenes aprenden oficios, expresión artística, sobre sus derechos y tratan de brindarles una educación integral, manifestó Joe. La activista pide su colaboración de la ciudadanía para seguir ayudando a la comunidad. Los interesados pueden contactarse con el Cántaro Bioescuela Popular puede en Facebook o comunicarse al 0291 432-954.
El 15 de febrero lanzarán el calendario de actividades de los 18 talleres populares que van desde costura, confección hasta guitarra y teatro. La única condición para participar de ellos es que los estudiantes se comprometan a ayudar en su barrio y comunidad.