Uno de los detenidos es de origen marroquí con las iniciales H.M., de 30 años; y el otro, de procedencia argelina, con iniciales S.K., de 29 años, según informó la Policía de Serbia.
“Estamos esperando más informaciones acerca de este caso de estos cadáveres hallados en contenedores. Hasta el momento, dos personas fueron capturadas en relación a este caso. Hay elementos que vincularían a estas personas al hecho”, dijo el comisario Nimio Cardozo, jefe del Departamento de Antisecuestros de la Policía Nacional, en conversación con La Unión.
Indicó que, según el correo que llegó ayer a la Policía Nacional remitido por sus pares de Serbia, se trata de una banda que se dedica a la trata de personas en los países de la zona de los Balcanes y que tendría vinculación con las personas que finalmente fueron encontradas muertas en nuestro país.
Con relación a este caso en particular, señaló que la información principal es que esta red de trata capta a ciudadanos de origen africano que tienen deseos de viajar a Europa en busca de mejores condiciones de vida, aunque sea de manera ilegal y a escondidas por temor a ser deportados, ya que nunca poseen documentos y/o permisos de entrada. Los miembros de estas bandas, a cambio de un importante monto de dinero, eran las encargados de introducir a los polizones en los contenedores en la zona de los Balcanes, desde donde debían viajar a países del centro y occidente de Europa a bordo de trenes de carga.
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El caso
7 cadáveres fueron encontrados en el interior de un contenedor en el barrio Santa María, de Asunción. De acuerdo a los datos, el objeto había salido en tren desde Sid, una ciudad remota de Serbia, en julio pasado, y llegó al Puerto Terport, de Villeta, Departamento Central, tras hacer paradas en barco en puertos de Croacia, Egipto, España y Argentina.
El container llegó por tierra al barrio Santa María, de Asunción, hasta la casa del propietario del objeto, de nombre Vernon Rempel.
Según las investigaciones, se cree que las personas murieron poco después de haber partido del país balcánico y sus cuerpos habían estado descomponiéndose durante cerca de tres meses. Dentro del objeto fueron encontradas comida y agua como provisión para solamente 72 horas, lo cual sustenta aquella teoría, ya que el viaje de Serbia a Italia no hubiese durado más de 12 horas en tren.
De hecho, aparentemente los desafortunados inmigrantes recorrieron gran parte de los casi 20.000 kilómetros ya muertos, aparentemente a raíz del poco espacio y aire que había dentro del container, provocando dificultades para respirar.
Aparentemente el inconveniente se produjo o en Serbia o en Croacia. En uno de estos dos lugares el container fue subido a un barco con destino a América, en vez de seguir su camino en tren de carga rumbo a Italia.
Los agentes policiales y la Fiscalía también examinarán los teléfonos celulares que fueron encontrados junto a los cuerpos.
De acuerdo con la publicación de un joven llamado Smail Maouchi, quien se presentó en Facebook como amigo de las víctimas, dijo que estas personas buscaban llegar a Italia en tren desde Serbia, país que había sido utilizado como punto de encuentro de las 7 personas que meses después serían encontradas muertas en el contenedor.
Los nombres de las personas serían Ahmed Belmiloudi (marroquí), Mohamed Hadoun (marroquí), Rachid Sanhaji (marroquí), Said Rachir (marroquí), Zugar Hamza (argelino), Sid Ahmed Ouherher (argelino) y Yessa Aymen (egipcio).