“Tenemos que parar la pelota. Estoy de acuerdo con que la economía está un desastre y que por culpa de los irresponsables la gente que trabaja bien paga las consecuencias, pero, a final de cuentas, muere gente de todos los niveles, incluso aquella que se cuidó o la que se fue a fiestas. Parar por 15 días para intentar frenar la transmisión de este virus”, dijo Pintos en conversación con La Unión, mencionando que este parón significaría “no transporte público, no negocios abiertos, eventos suspendidos y que, por ejemplo, los supermercados se abran solo a la mañana los fines de semana”.
Aseguró que esto ayudará a limitar el movimiento de gente y que, si no se procede a la cuarentena total, “los daños serán mayores”. “Probablemente me van a linchar, pero es lo que yo creo (…) En estos momentos, la única razón por la que se liberan las camas, es por un alta médica o porque en el peor de los casos, muere alguien”, dijo Pintos, señalando que para que surta efecto se necesitará del control por parte de las autoridades, como del Ministerio del Interior y la Policía Nacional. También confirmó que aquella vez que se registró un récord de fallecidos con 82 en un día, ocurrido el pasado 13 de abril, en realidad solo 22 murieron en camas de terapia y que el resto pereció esperando ser atendidos en esos lugares.
En ese orden, la directora señaló que “frustra salir a la calle y ver gente sin tapabocas más las reuniones que se siguen haciendo, mientras las salas están llenas en todos los hospitales”.