Luego de la balacera en el barrio capitalino Manorá, donde un niño y su padre fallecieron tras un ataque a balazos al rodado en la que se trasladaban, la Policía Nacional activó controles en varios puntos de Asunción y fue así como agentes ubicados en la Costanera visualizaron un vehículo con características similares a las citadas por testigos del atentado, quienes habían descrito una camioneta de la marca Toyota, tipo Hilux, de color bordó.
En la intersección de la Costanera con la avenida General Santos, uniformados rodearon al citado vehículo y este detuvo la marcha. Agentes de la Comisaría 9ª manifestaron que dentro del rodado se percibía olor a pólvora. El hombre que iba al mando de la camioneta era Basilio Escobar, quien quedó detenido. El sujeto es el propietario del móvil.
El abogado Rolando Cáceres, representante legal de Escobar, manifestó que su defendido había ido a un local de la empresa Camping 44 a probar un arma, explicando que tenía pensado comprar una escopeta calibre 12. “Eso se puede comprobar con las imágenes del circuito cerrado tanto interno como externo que posee instalado la firma, así como con las cámaras de seguridad del sistema 911 de la Policía Nacional”, expuso.
Señaló que su cliente “está bastante tranquilo” y que ni siquiera cerca estuvo cerca del lugar donde se produjo el hecho. “Es una persona que trabaja en el despacho de Aduanas y estudia. Además, no tiene antecedentes penales”, aseguró.
Con relación al “toco” de marihuana encontrado en el rodado, indicó que solo se trataba de 2,4 gramos de la hierba, por lo cual está dentro de los límites legales (10 gramos como máximo).
Se espera que Basilio Escobar declare hoy ante la fiscal del caso, Ariela Chaparro. “Estamos esperando el oficio para que preste declaración en el Ministerio Público”, afirmó.
El otro detenido es Héctor Cálcena, quien estaba como acompañante del dueño de la camioneta. También negó cualquier vínculo con el hecho.