Un patrullaje desarrollado por Agentes Especiales de la SENAD localizados en Mariscal Estigarribia, incursionaron en Teniente Rivarola, zona fronteriza con Bolivia. El operativo valió para que una importante carga de marihuana oculta entre la vegetación del lugar fuera descubierta. La droga ya había sido procesada y a su vez empaquetada. Más de 200 kilos de la hierba que estaban cubiertos con una carpa fueron hallados.
Los agentes ingresaron hasta una zona boscosa, con base en sospechas relacionadas a la existencia de un lugar donde un alijo de marihuana fue oculto. Ya dentro del recorrido cercano a la línea limítrofe con Bolivia, parte de la comitiva designada a la tarea de rastreos descubrió que entre los arbustos del terreno se encontraba un cargamento compuesto por 272 KILOS de cannabis distribuidos en 13 PAQUETES.
Los indicios hallados en el sitio indican que la carga fue custodiada hasta minutos antes de la incursión, ya que una motocicleta también fue hallada junto con el alijo. Cada paquete fue laboriosamente envuelto en cintas de embalar. Una carpa era utilizada tanto para preservar la droga, así como también como modo de ocultamiento.
Los intervinientes sospechan que por la forma en que proceden los narcotraficantes en la región, el cargamento de marihuana debía se intercambiado por pasta base boliviana. Traficantes de un lado y otro de la frontera recurren a este mecanismo dado que el mercado paraguayo de drogas está potenciado en la producción de la hierba, mientras que el de Bolivia en la provisión de cocaína, con lo cual buscan beneficiarse mutuamente.
El fiscal quien encabezó al Ministerio Público fue el Abg. Andrés Arriola Ramírez, quien coordina junto con la Oficina Regional de la SENAD en Mariscal Estigarribia operativos en todas las áreas que atañen al tráfico de drogas y delitos conexos.