Autoridades del Ministerio de Salud brindaron este lunes un informe sobre la situación epidemiológica del país en una conferencia de prensa que estuvo encabezada por el presidente de la República, Mario Abdo Benítez.
En primer término, el mandatario recordó que el compromiso ciudadano es la clave para frenar la propagación del virus. Es por ello que resaltó la madurez de gran parte de los paraguayos que se adhirieron a las disposiciones del Ejecutivo.
Afirmó que las restricciones implementadas en las “zonas rojas”, tuvieron resultados positivos y permitieron bajar lentamente la curva de contagios diarios que está en un promedio de 1.800 a 2.000 contagios.
En ese contexto, sostuvo que Paraguay está atravesando por una relativa meseta, no obstante admitió que sigue siendo alta, situación que se refleja en los hospitales cuyas salas de internaciones están al tope.
“Nuestro objetivo con estas medidas sanitarias es bajar los niveles de contagios, es importante aclarar que lo que hicimos en Semana Santa recién se va a finales de esta semana”, remarcó.
Casi 10% menos de contagios en comparación a la semana anterior
A su vez, el director de Vigilancia de la Salud, Dr. Guillermo Sequera, expuso que a finales de enero y principios de febrero, Paraguay registró un aumento considerable de positivos por coronavirus, hecho que saturó al sistema sanitario.
Manifestó que durante la última semana, se tuvieron casi 10% menos de contagios en comparación a la semana anterior. “Esto no está relacionado a las medidas adoptadas en Semana Santa sino a las medidas previas”, refirió, al tiempo de mostrarse optimista en que durante esta semana se tendrán menos casos.
En esa misma línea, mostró los cuadros que demuestran la alta ocupación de camas tanto en los hospitales públicos como privados, debido al récord de positivos.
“Desde el Ministerio de Salud queremos una cuarentena total que dure más tiempo, presidente desde la parte técnica, sabemos que las cuarentenas muy duras y prolongadas no pueden aguantar por mucho tiempo”, indicó.
En esa misma línea, mencionó que están analizando la posibilidad de implementar un sistema muy similar al de Chile denominado “serrucho”, que contempla una combinación de medidas severas y más relajadas, dependiendo de las áreas de contagios.
Al respecto, enfatizó en que esta semana “no es para relajarse”, sino que hay muchas restricciones que se deben cumplir para afianzar la lucha contra la pandemia.
Pedimos a la gente que se autorregule hasta que disminuyan los casos
Por otro lado, el jefe de Estado pidió a la gente a “autorregularse”, teniendo en cuenta los niveles de contagios “muy altos” y que esto evidencia un peligro para la población. En ese punto, desde el Gobierno apuestan a la contraloría ciudadana para garantizar el cumplimiento de los protocolos sanitarios a fin de mitigar el impacto del virus.
Igualmente, el gobernante pidió a los sectores gastronómicos y de eventos para fortalecer e identificar los lugares de mayor peligro y evidenciarlos ante los organismos competentes.
“El gran objetivo de todas las medidas es mitigar la propagación del virus para poder regular la ocupación de nuestro sistema de salud”, recalcó.
El titular del Ejecutivo reconoció que no sabe hasta cuánto se extenderá la pandemia, es por eso que remarcó la necesidad de mantener los cuidados e ir desarrollando capacidades en las distintas áreas económicas, a fin de mantener la dinámica y retener los empleos.
“Tenemos que seguir construyendo capacidad para convivir con el virus hasta que la enfermedad desaparezca”, subrayó.
Con información de ip.gov.py.