“En ese grupo de Telegram agregaron muchas cosas, como fotos viejas, y una de ellas, muy mala por cierto, de uno de las personas contando dinero”, señaló el letrado en diálogo con La Unión, asegurando que la imagen en cuestión “data de hace 10 años”.
En ese orden, dijo que más que capturas de pantalla de esos mensajes no se tienen más pruebas. “Todo lo que se dice son puras especulaciones. En esta causa todo es retórico”, subrayó.
Además, refirió que la casa a la que Soares hace referencia diciendo que la perdió por haberla hipotecado para ayudar a Mario Ferreiro, es la misma sobre la cual hace varios atrás el propio sociólogo había dicho que no le pertenecía.
“Estamos en proceso de recopilar todos los datos y documentos para contestar a todas las acusaciones”, expresó también, en alusión a las denuncias realizadas por el propio Soares y Alfredo Guachiré, exfuncionario de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) y quien aseguró que en su momento que había sido presionado por Rocío Casco y otra persona para incriminar al sociólogo y comunicador ante la justicia sobre el caso conocido como “Coquitos de Oro”, que nunca fue resuelto.