La escribana Johana González salió al paso de las declaraciones del diputado Ramón Romero Roa, quien había afirmado que los exámenes que se toman a los escribanos son “comprados” y que no aprueban por méritos.
Afirmó que se presentó a tres exámenes de concurso para notario, de los cuales los dos primeros se declararon desiertos (ningún postulante pasó el mínimo requerido). Señaló que el tercer test lo aprobó superando el puntaje necesario con preparación y estudio, resaltando que “a mí me consta la transparencia del concurso. A nadie pedí ayuda. En ningún momento se vio indicios de que vendieron los temas”.
Agregó que las verificaciones de los exámenes también se realizan de manera limpia.
González no entiende por qué el legislador colorado Romero Roa lanzó estas acusaciones, agregando que le generaron indignación sus dichos.