Celina Garay, una residente del barrio Central de la localidad, es una de las denunciantes, afirmando que ella paga mensualmente por el servicio de recolección de residuos. “Yo pago, pero cosas grandes no quieren llevar porque no pueden quemar. Solo elementos de plásticos, papeles y cosas así”, dijo, señalando que, los recolectores inclusive no quieren llevar los materiales que citó cuando se trata de grandes cantidades.
Sobre el punto, aseveró que a veces, cuando los recolectores acceden a llevar estos elementos, no lo hacen a cambio de un “favor” de G. 30.000.
“Ahora por ejemplo estoy sacando una heladera, una cocina y unos cuantos sillones viejos”, detalló, añadiendo que, en caso de que los camiones no recojan estos residuos, guardaría de nuevo todos estos elementos en su vivienda.
Celina señaló que en su casa hasta el momento no se han registrado casos de dengue, aunque mencionó que uno de sus hijos actualmente presenta fiebre y no tiene certeza si se trata de un caso de la citada enfermedad.
Estima que no será suficiente solamente un día para eliminar criaderos en la ciudad, asegurando que “Mariano Roque Alonso está minado de dengue”.
En otras zonas de la ciudad se pudieron observar cisternas, centrifugadora, y hasta antenas.