Un grupo de investigadores estadounidenses diseñaron un robot con la forma de un pez que cuenta con un sistema vascular sintético lo que le permite movilizar algunas partes de su estructura y almacenar energía. Gracias al sistema hidráulico interno es posible que el robot nade en el agua, además a contracorriente en una de las pruebas que fueron llevadas a cabo por el equipo de la Universidad de Cornell (EE.UU.).
Según los autores, este avance puede facilitar a que los futuros diseños de robots autónomos aumenten su eficiencia y su capacidad de conservar energía. Los investigadores crearon un sistema vascular con baterías de flujo interconectadas e integradas en un robot en forma de pez Pterois, una especie presente en los océanos Indico y Pacífico.
Un líquido electrolítico circula por los conductos internos del robot, y los sistemas electrónicos del autómata reciben la corriente necesaria para funcionar.
Los investigadores indican que este pez robot puede permanecer operativo hasta 36 horas y es capaz de nadar a una velocidad de 1,5 cuerpos por minuto en contracorriente.