“Una práctica muy común era importar productos de china, cambiar etiquetas y reenviar de nuevo como producto de origen nacional con certificado paraguayo en concepto de exportación a, por ejemplo, Brasil o Argentina, con 0% de gravamen aduanero, es decir, sin impuestos. Esto fue algo que se logró erradicar hace 30 años con la intervención que hizo la Asociación de Confeccionistas. Nosotros estamos muy preocupados que, con la decisión del MIC, vuelvan estas prácticas porque no existe ningún tipo de control. Es muy difícil confiar en la documentación de instituciones tan débiles como las que tenemos en nuestro país”, manifestó Santiago Colombino, vicepresidente de la AICP, en contacto con Todas Las Voces por La Unión.
Indicó que lo que queda al descubierto y sin control es la práctica de que “vos importes un producto chino, le cambies la etiqueta, pongas un certificado nacional y lo exportes al Brasil”. “Todo ese sacrificio y ese tiempo que lograron que nuestras exportaciones vayan con documentaciones válidas y legales se ven de nuevo ahora amenazadas”, advirtió Colombino.