Potabilización del agua
El agua puede ser una fuente importante de microorganismos infecciosos, transmitiendo enfermedades. Es por ello que, tanto para beber como para cocinar o lavarse los dientes, es importante desinfectarla. Se recomienda hervir el agua durante cinco minutos o desinfectarla con lavandina. Para desinfectar con lavandina, seguir los siguientes pasos:
1. Utilizar un filtro para quitar los materiales suspendidos en el agua.
2. Colocar el agua en un recipiente limpio y agregar lavandina a razón de 2 gotas de lavandina por cada 1 litro de agua.
3. Dejar reposar el agua tratada con lavandina durante 30 minutos. El agua debidamente tratada debe tener un leve olor a cloro. De no ser así, repetir la dosis y dejar reposar el agua durante 15 minutos más. Luego, se puede eliminar el olor a lavandina del agua tratada pasándola por recipientes limpios varias veces. En caso de que el agua sea muy turbia, usar 4 gotas de lavandina por cada 1 litro de agua.
Desinfección de superficies
Se recomienda realizar una limpieza a fondo de todas las superficies sólidas (piso, concreto, mesadas, muebles metálicos y de madera) con agua caliente y detergente. Luego, desinfectar con una solución formada por 1 taza de lavandina por cada 5 litros de agua.
Igualmente, se aconseja arrojar a la basura las tablas de madera para picar alimentos que hubieran sido afectadas por aguas contaminadas, las tetinas de las mamaderas y los chupetes. Estos artículos no pueden ser desinfectados en forma apropiada después de tocar aguas contaminadas de una inundación.
Aquellas superficies que entran en contacto con los alimentos deben ser limpiadas y desinfectadas correctamente:
1. Limpiar con jabón y agua segura y tibia.
2. Enjuagar con agua segura.
3. Desinfectar el artículo sumergiéndolo por un minuto en una solución de 1 taza de lavandina por cada 5 litros de agua.
4. Secar al aire libre.
Este procedimiento se puede realizar también para desinfectar los juguetes plásticos de los niños.
Otras recomendaciones
1. Lavarse las manos frecuentemente antes de comer o preparar alimentos, después de ir al baño y después de tocar elementos contaminados con agua de inundación o desagüe.
2. Toser y estornudar cubriéndose con el antebrazo para evitar la propagación de gérmenes.
3. Ventilar y airear los ambientes.
4. Mantener la vigilancia sanitaria de los suministros de agua, aguas residuales, disposición de excretas y basuras, así como la vigilancia de la calidad e inocuidad de alimentos en los albergues.
5. Durante la limpieza utilice guantes resistentes para evitar lesiones en la piel, botas y tapabocas en áreas con polvo o con moho por la pared, tenga especial cuidado al mover muebles por el riesgo de la presencia de animales ponzoñosos.