Balmelli comentó que la estrategia de vacunación que está desplegando Indonesia, caracterizada por empezar “al revés del mundo” debido a que son los únicos que arrancaron por inmunizar a su población joven en vez de a los ancianos, no es la más conveniente para nuestro país. Explicó que, por una cuestión de baja cantidad de vacunas disponibles, se comienza por aplicar las dosis en Paraguay a los adultos mayores, ya que apenas componen el 10% de la población total.
“No es lo ideal para nuestro país porque no tenemos todavía vacunas y además llegarían de a poco, entre 150.000 y 300.000 (por tanda), también porque tenemos aproximadamente 90% de bono demográfico relativamente joven”, expuso el experto en conversación con La Unión.
En otro orden, Balmelli manifestó que una vez que se comience con el Plan de Vacunación contra el COVID-19, previsto para mediados de febrero, este no debe detenerse y que con cada “puchito” de dosis que arribe a nuestro país (entre 150.000 y hasta 500.000 por tanda) tienen que optimizarse los recursos para poder llevar adelante de buena manera y cumplir con el calendario, atendiendo que “entre febrero y marzo estaremos navegando dentro del canal del brote pero en la parte media baja”.
Considera que, tras el brote de contagios generados por las fiestas de fin de año, el próximo será tras el inicio de clases presenciales, incluidas en el formato “híbrido” que planea el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC).