“Tuvimos conocimiento del hecho a través de una llamada del encargado de la estancia Palomares, a nueve kilómetros de la ruta PY-9 (Transchaco). Aparentemente la avioneta tuvo un problema mecánico y posteriormente capotó en el lugar. Fueron convocados personal de la SENAD (Secretaría Nacional Antidrogas) y Antinarcóticos”, dijo el comisario Víctor Daurelle, jefe de Prevención y Seguridad del Departamento de Boquerón, en conversación con Unión TV y radio La Unión.
Señaló que la avioneta monomotor llevaba matrícula boliviana y estaba vacía. En cuanto a los ocupantes, dijo que no han podido ser identificados, ya que habrían huido del lugar.
Los investigadores presumen que habrían sido dos los tripulantes de la aeronave. Sobre el punto, el comisario aseveró que lo que llama la atención es que solamente la parte de la cabina fue incinerada.
La Policía y la SENAD presumen que se habría tratado de una narcoavioneta.