Los médicos imputados son María Fátima Bastos, José Manuel Ovando y Óscar Cabrera.
“Nos basamos en toda la documentación que hemos recogido dentro de la investigación”, comentó Sara Torres, una de las fiscales del caso, en contacto con La Unión.
Indicó que, además de los videos captados por las cámaras de seguridad del sanatorio, las imputaciones también se sostienen en las declaraciones de varios testigos, la historia clínica y el informe de la Superintendencia de Salud.
El caso
El pasado 20 de agosto Renato fue llevado por sus familiares hasta el Sanatorio Migone por un cuadro febril, acompañado de una gripe. Fue derivado a urgencias, donde su estado se complicó. Según su familia, se habría producido una negligencia o mala praxis por parte de los médicos que lo atendieron, asegurando que, o le suministraron medicamentos erróneos para su cuadro o le dieron una sobredosis. Supuestamente, este hecho provocó en el niño una una convulsión y posterior muerte.