“Como mínimo, el cuerpo llevaba 30 días en el lugar, pero podrían ser más. Hoy, más que nunca se aplica la frase en medicina: el tiempo que pasa es la verdad que se aleja. Nosotros necesitamos evidencias biológicas, pero estas se van perdiendo a lo largo del tiempo en el caso de los fallecimientos. Hay muy escasos tejidos blandos ya descompuestos. Más elementos no tenemos para dar certezas.. Es escasísima la información que podemos dar porque es escasísima la información que nos da el cuerpo, ya que se halló casi en estado de esqueletización. Lo máximo que podemos hacer es presumir. Además, se nota que ya hubo presencia de depredadores sobre el cuerpo, como insectos y pájaros”, detalló Lemir en diálogo con Cada Siesta por La Unión, indicando que lo que pudieron recoger de los restos fueron cabellos y “un hueso largo para hacer el ADN”.
Indicó que es aún solo “probable” asfixia la causa de muerte de Isaura porque “se basa en la descripción del lugar del hecho realizada por el médico forense”, en referencia al trabajo de Cristian Allegretti. “Decimos asfixia ‘a secas’, porque no tenemos elementos que nos indiquen que hubo asfixia mecánica por estrangulación o ahorcamiento”, señaló Lemir.
El caso
La joven Isaura Bogado, de 20 años, desaparecida desde hace tres semanas, fue encontrada muerta en un patio baldío este miércoles en Ñemby. Fue su madre quien reconoció el cuerpo. La Fiscalía investiga si de verdad se trató de un suicidio, versión que surgió como primera hipótesis por una carta encontrada en el lugar, sin descartar que se haya tratado de un homicidio.
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