“Los guardias de la casa ya habían alertado de ese vehículo, pasaba varias veces, con música a todo volumen, pero bajaban la velocidad frente a la casa. Esto pasó varias veces. Dada el alerta persistente, tenemos que decir que funcionó el protocolo (…) Celebro el trabajo de la Policía porque se demostró que el sistema de inteligencia funciona”, expuso Pérez en contacto con Nuestra Mañana por Unión TV y radio La Unión.
Mencionó que sospecha que las amenazas provendrían específicamente del clan Rotela, con cuyos miembros había tenido “roces” cuando ella ocupaba el cargo de ministra de Justicia.
Así mismo, también cree que el grupo vinculado al laboratorio de drogas desmantelado a fines del año 2020 en el Penal de Tacumbú la estaría amenazando, así como los implicados en el motín en la cárcel de San Pedro de mediados del 2019, en el que se habían enfrentado integrantes del clan Rotela y del Primer Comando da Capital (PCC). “Podemos decir que rondan todos los casos fuertes en los que estuvimos”, dijo la asesora presidencial.
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Indicó que ya le fueron transmitidos los nombres de las cinco personas que estaban a bordo de la camioneta en cuestión, pero que ninguno estaría vinculado, al menos de manera directa, a algún caso.
Más allá de todo lo sucedido y las amenazas, Pérez aseveró que no cambiará su rutina y seguirá trabajando.
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