El Gobierno Nacional hizo pública esta tarde la decisión del CONARE sobre el caso de Juan Arrom y Anuncio Martí, sujetos habían escapado al vecino país antes de ser juzgados por el secuestro de María Edith Bordón Vda. de Debernardi, perpetrado en noviembre del año 2001.
La resolución del CONARE abarca a Víctor Colmán, quien se había escapado con ellos al Brasil. La Secretaría Nacional de Inteligencia detalló que la votación fue de 6 a 1 a favor de retirar el estatus de “refugiados políticos”.
Celebramos la decisión del CONARE que ha dictaminado hoy la revocación de estatus de refugiados de Arrom y Martí. El Paraguay vuelve a apuntar otra victoria histórica! ??
— Marito Abdo (@MaritoAbdo) June 14, 2019
Tras la decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), que falló a favor del Estado paraguayo en la millonaria demanda que presentaron ambos por tortura, el gobierno nacional confiaba en que el CONARE también decidiría a favor del pedido nacional.
“Ganamos 2 a 0 y demostramos que cuando trabajamos con planificación podemos lograr todo juntos”, destacó el canciller nacional, Luis Castiglioni, en conversación con La Unión, aseverando que el Ministerio de Relaciones Exteriores ya está trabajando para el pedido de extradición de los tres prófugos de la Justicia paraguaya.
El caso: Secuestro, millonario rescate y huida al Brasil
María Edith Bordón fue secuestrada en la tarde del 16 de noviembre del 2001, en el Parque Ñu Guasu, y fue liberada el 19 de febrero del 2002 tras el pago de 1.000.000 dólares. El ilícito fue perpetrado al ahora extinto Partido Patria Libre (PPL), que posteriormente se convirtió en el autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
Los primeros condenados por aquel sonado caso fueron José Tomás Rosa, su esposa Nidia Espínola y De los Santos Saldívar. Más tarde, también fueron sentenciados Alcides Oviedo Brítez, señalado como creador y líder de la banda, y Carmen Villaba.
En cuanto a Juan Arrom, según el Ministerio Público fue el planificador del secuestro, mientras que Anuncio Martí fue uno de los “guardias” mientras la empresaria se hallaba en poder de los maleantes.
Este plagio fue el primero de una lista de secuestros perpetrados por el ahora EPP. De hecho, el cautiverio de Bordón es considerado como el que inició la “industria del secuestro” en Paraguay.