Carlos Florentín, presidente del BNF, explicó que la entidad elevó de G. 150 millones a G. 200 millones el tope de deudas que podrán ser adquiridas.
“Lo que estamos haciendo es firmar con diferentes Ministerios la compra de deudas. Se busca dar un respiro al funcionario, al empleado público”, aseveró Florentín en contacto con La Unión.
Así mismo, amplió el plazo de 5 a 7 años y fijó tasas de interés hasta a un 14%, de modo a “darle un respiro” a los clientes en sus deudas.