“Esto es lamentable. Se está deforestando groseramente la reserva”, criticó Diego Torales, de la Comisión de Defensa de la ARP, en comunicación con La Unión, señalando que el objetivo principal de los destructores es plantar marihuana en el sitio.
Manifestó que ocho puentes se han instalado de forma clandestina sobre el río Aguaray-mi para dar paso a los “rollocamiones”.
En ese orden, criticó que la Fiscalía del Medio Ambiente ha cumplir la ley de “Deforestación Cero” solo contra productores, reclamando igualdad en la aplicación de la ley. “Si vos sos productor y querés desmontar media hectárea para construir un gallinero, no se puede; pero si viene un grupo de narcotraficantes a talar bosques, puede hacerlo mañana, tarde y noche y puede hasta construir puentes”, repudió Torales.