“La pregunta recurrente es si realmente hubo un cambio, y la verdad que sí. La movilización de jóvenes impulsó muchas cosas desde ese día”, dijo Guillén en diálogo con Enfoque 800, resaltando inicialmente la renuncia de Froilán Peralta, entonces rector de la UNA, presionado por el movimiento UNA No Te Calles y quien fuera “sacado del mapa universitario”.
En ese orden, destacó que también se ha logrado el cambio del estatuto de la institución a favor de los estudiantes, así como la instauración del arancel universitario. Aseveró que estas dos éxitos fueron conseguidos desde aquella movilización de alumnos de la UNA.
No obstante, la dirigente reconoció que “no se logró todo lo que se quería” en relación a las modificaciones del manejo de la UNA a favor de los alumnos, por lo que los estudiantes deberán seguir luchando en el futuro. “El estudiantado debe ser escuchado dentro de las prioridades”, enfatizó.
Las manifestaciones estudiantiles conocidas con el lema “UNA No Te Calles” fueron una serie de movilizaciones realizadas a partir del 21 de septiembre del 2015 en el Campus de la Universidad Nacional de Asunción, situado en la ciudad de San Lorenzo, ante las denuncias realizadas en medios periodísticos sobre hechos de corrupción y mal manejo de los recursos cometidos por el entonces rector Froilán Peralta, quien terminó renunciando pocos días después.