La mujer expuso que el hombre, de nombre Alberto Meza, la tenía encerrada desde los 15 años de edad, luego de que la obligara a firmar un “contrato de trabajo” hasta los 18 años, explotándola sexualmente.
Sin embargo, indicó que a los 18 años cumplidos no la dejó salir, señalando que la tuvo “atada” hasta los 22 años, cuando finalmente pudo escapar y se fue a vivir a Curuguaty.
Expuso que todo empezó hace 10 años, cuando había sido engañada por una compañera de colegio, quien le había dicho que Meza era su tío cuando, en realidad, era su pareja.
Afirmó que el sujeto en cuestión prostituía a cinco adolescentes al mismo tiempo, a quienes les sacaba el 50% de lo recaudado en las “salidas”. En ese orden, dijo que el sitio donde explota a las mujeres está ubicado en cercanías de la fábrica de lácteos “Doña Ángela”, sobre la avenida Mariscal López, en Fernando de la Mora, Zona Norte.
Señaló que actualmente tiene 25 años y que ya ha denunciado el caso en dos ocasiones anteriores, pero que “el tipo les pagaba a los policías y mandaba retirar la denuncia”. Así mismo, mencionó que el Meza la había obligado a abortar en tres ocasiones y que el individuo hasta tienen un video de uno de los procedimientos. “Me arruinó la vida, la verdad”, expresó Daysi.
No obstante, afirmó que ahora se animó nuevamente a presentar una denuncia debido a que ahora se siente “respaldada”, ya que, además de la Fiscalía, también fue presentada ante la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Senadores.
Daysi comentó que actualmente trabaja como playera y tiene dos hijas, de 6 meses y 4 años, respectivamente. En ese orden, aseveró que ha tratado de rehacer su vida, luego de haber perdido gran parte de su juventud encerrada y siendo explotada sexualmente. No obstante, admite que tiene miedo porque Meza “es un hombre muy peligroso”.
La fiscal que investiga el caso es la agente Karina Sánchez.