Señaló que Armoa frecuentó la casa a partir del 29 de septiembre y que, transcurridos unos días, Bruno Marabel comenzó a limpiar “todo el tiempo” algunas partes de la casa, mientras que otras mantenía cerradas bajo llave. Indicó que esto llamó la atención de su representada y empezó a hacerle ciertas preguntas, más aún cuando se percató de que había manchas de sangre en las muebles y paredes, tras lo cual el joven cambió su actitud en el trato con ella y se tornó violento, respondiendo siempre que “parió la perra” que tenía en la vivienda.
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“Eran compañeros de trabajo y la llevó a vivir con ella supuestamente como pareja (…), pero a partir de la fecha en que empezó a estar en la casa, ya no había más nadie allí”, expuso la letrada en comunicación con La Unión, por lo cual considera que la familia falleció antes de que la joven se mude en el sitio. Sobre el punto, afirmó que Marabel siempre comentaba que él vivía solo en el lugar, debido a que sus familiares residían en Argentina y otras estaban de viaje.
En el mismo orden, señaló que Armoa nunca conoció a Dalma Rojas ni a los demás integrantes de su familia.
Sostuvo que su defendida desbloqueó el patrón de su teléfono celular para que el Ministerio Público pueda acceder a los mensajes y llamadas guardados en él. Así mismo, dijo que la joven “dio nombres” a los cuales la Fiscalía deberá llamar para demostrar que “todo lo que manifestó es cierto” y que es inocente. Consultada sobre quiénes son las personas a las cuales su clienta mencionó en la declaración indagatoria, prefirió no revelarlos.
Por último, anunció que presentará un auto de revocatoria de prisión para que Armoa recupere su libertad. La joven actualmente se halla recluida en la cárcel del Buen Pastor.
El caso
Bruno Marabel fue imputado por el feminicidio de su esposa, Dalma María Rojas Rodas (25), y por homicidio doloso del que resultaron víctimas los padres de esta mujer, Julio Rojas Delvalle (52) y Elva Graciela Rodas de Rojas (51), así como los hijos de Dalma, Cristian Santino Barrios Rojas (6) y Saulo Pío Nahir Rojas (4). Por su parte Marcelo Gabriel Sosa Díaz, Araceli Sosa Díaz y Alba Armoa se hallan imputados por homicidio doloso en carácter de cómplice.
El hecho ocurrió en una vivienda ubicada en la intersección de las calles Oliva casi Montevideo, de Asunción, y fue descubierto el pasado 8 de octubre.