Samudio señaló que solo un grupo de operadores de estaciones de servicios PETROPAR está en contra del reajuste (determinado que arranque desde hoy), indicando que son solo 30 y no el total, compuesto por 150 personas. “Ellos son mis clientes y están en su derecho. Pero esto normalmente ocurre cada vez que ocurren aumentos”, explicó en contacto con La Unión.
No obstante, dejó entrever que el hecho de que los operadores mantengan los precios y no los reajusten podría tener un “trasfondo político”. “Algunos operadores están disgustados porque yo estoy poniendo orden, restringiendo las líneas de crédito”, expresó Samudio, indicando que, en contrapartida, “parece que ellos quieren seguir con la forma en que se venía operando en que se les refinanciaba, se les ‘bicicleteaba’; y eso no se puede hacer porque somos administradores de la cosa pública”.
En ese sentido, dijo que encontró la institución “muy desordenada financieramente”. “Las deudas son grandes, no hay garantías, las líneas de crédito están excedidas. Esto se manejó muy mal a mí criterio”, aseguró la titular.
Samudio había afirmado que es necesario que los precios de PETROPAR sean reajustados para mantener la competencia, teniendo en cuenta que los emblemas privados ya incrementaron los suyos desde hace aproximadamente un mes.