El año pasado, David Timoteo Ferreira había sido detenido en una lujosa casa, con un arsenal de armamentos. Otros seis habían caído con él, pero un mismo juez Cándido Insfrán, de Pedro Juan Caballero, había liberado a varios de ellos.
Ferreira se sumó a la lista de los beneficiados por el magistrado, no obstante, apenas logró su libertad, la Fiscalía pidió que sea detenido de nuevo, orden que fue cumplido por la Policía Nacional.
“Cuando salía de la penitenciaría, la Policía de Investigaciones lo atrapa de vuelta”, detalló el corresponsal Rodrigo Pedrozo. La petición de que Timoteo fuera detenido otra vez, partió de las autoridades brasileñas, que lo consideran un peligroso criminal y no admitían que el mismo fuera liberado.