La periodista Mabel Rehnfeldt, del grupo ABC Color, fue llamada a prestar declaración testifical ayer ante el Ministerio Público en razón de la publicación del caso de los audios filtrados del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM).
La comunicadora lamentó el hecho de que ella haya sido la que preste declaración en lugar de los que están directamente implicados en el caso.
En referencia a lo que le dijo la abogada de Óscar González Daher, Sara Parquet, quien le preguntó “cómo y de dónde obtuvo las grabaciones”, cuestionó que el Ministerio Público haya permitido que la defensora del ex senador le haya hecho esa consulta. “La Fiscalía no pudo permitir que en sus narices me pregunten algo que es violatorio de la Constitución Nacional”, criticó en contacto con La Unión R800 AM. Sobre el punto, señaló que se ampara en el artículo 29 de la Carta Magna, que habla de la Libertad del Ejercicio del Periodismo. En su caso particular, menciona que los periodistas de los medios masivos de comunicación social en cumplimiento de sus funciones, no serán obligados a actuar contra los dictados de su conciencia ni a revelar sus fuentes de información.
“Cada vez que recuerdo que me hicieron esa pregunta me invade la impotencia”, confesó.
En este orden, dijo que “si yo llegara a revelar qué hice para averiguar de quiénes eran las voces de cada uno, voy a involucrar a terceros, así que me amparo en el artículo 29 de la Constitución”. “Puedo pasarme toda la vida haciendo guampas en el Penal del Buen Pastor, pero nunca, jamás, voy a revelar mis fuentes”, añadió.
Sobre el punto, dejó en claro ante el Ministerio Público que ninguna de las personas a las que se las escucha en los audios ha negado que ‘su voz no era su voz’.
Contó que le preguntaron cuestiones como la manera en que trabaja, qué sistemas utiliza en sus labores y “qué métodos estándares de periodismo de investigación” utiliza. “Parecía que yo era la investigada”, repudió la periodista, apuntando que lo que el Ministerio Público debe investigar son todos los ilícitos que se evidencia que se cometieron en esos audios, no cómo llegaron hasta ella las escuchas.
Aseveró que ella solamente recibió los audios y los difundió, asegurando que desconoce cuál fue la forma en que fueron grabados. Sobre el punto, indicó que “hasta hubo idea de gente de la Fiscalía de allanar, si fuese necesario, la sede del diario (ABC Color) para sacar los audios en bruto. Pero les dije bien que yo ya no los tenga más. Todos los audios que tenía difundí”.
Afirmó que de entre los tantos audios que le llegaron, hubo 3 o 4 escuchas que se trataban de conversaciones íntimas, los cuales ella manifestó que nunca los publicará. “De hecho, yo me comuniqué con los afectados y me comprometí a nunca difundirlos porque son cuestiones íntimas y no guardan relación con el orden público”, expuso.
Rehnfeldt dijo que fue a la Fiscalía con la esperanza de ayudar a colaborar con la investigación. Sin embargo, señaló que “salí con uno de los sabores más amargos de mi vida”. Inclusive, expresó que ahora mismo no siente miedo, pero sí una enorme incertidumbre “acerca de qué es lo que va a terminar pasando conmigo”. “Desde el 6 de noviembre mi vida es un infierno. Dejé de usar el teléfono de forma normal porque me avisaron que me iban a intervenir el celular. Dejé de utilizar el correo electrónico mío de manera normal. Ahora utilizo el correo que uso para comunicarme con la gente de WikiLeaks, que son cifrados. Incluso mi familia dejó de hacer un montón de cosas por mi culpa. Pensé que lo peor ya había pasado, pero me equivoqué. Yo creo que ahora se viene un escenario un poco más complicado”.
Señaló que a la declaración acudieron en total ocho defensores de los afectados. “Estuvieron los abogados de Carmelo Caballero, Óscar González Daher y Jorge Oviedo Matto. El que no acudió fue el defensor de Raúl Fernández Lippmann, Álvaro Arias”, detalló, añadiendo que declaró ante las fiscalas Josefina Aghemo y Claudia Morys.
Dijo sentir impotencia sobre lo que ella debió pasar en la Fiscalía. “Lo que más me ultrajaba era que González Daher estuvo ayer en Mburuvicha Róga tres horas. Habrán estado con ‘el escocés’, la ‘picadita’ y todo; mientras yo al mismo tiempo terminaba casi cuatro horas en una piecita de 5 por 5 metros escuchando preguntas”, repudió.
Rehnfeldt admitió que en estos momentos siente empatía por Fernández Lippmann, debido a que se está percatando que el caso se está inclinando hacia el “ipo’ihápe osóva hína (hacia donde la soga es más fina)”, en referencia a que el ex secretario general del JEM se encuentra imputado, mientras otros, con mayor poder y que también atentaron contra el orden de la justicia, siguen libres. “Nosotros dos vamos a estar colgados de una liana mientras los involucrados van a estar todos sentados en el Parlamento”, expresó la comunicadora.