Con gritos, reclamos y descontento terminó anticipadamente la reunión entre camioneros y representantes del Gobierno nacional. Ante la firme posición del Ministerio de Obras Públicas, los transportistas se retiraron antes de que se toquen todos los puntos en el encuentro.
Los gremios pedían la derogación o postergación del ingreso de los bitrenes en el norte del país, mientras que las autoridades nacionales explicaban que ven una oportunidad para generar empleos, ya que los bitrenes operarían entre Mato Grosso Do Sul y el Puerto de Concepción transportando granos y soja.
“Se truncó una reunión donde el Gobierno nacional puso lo mejor y la mejor voluntad para a beneficiar a todos los paraguayos”, dijo el ministro de Obras Públicas, Ramón Jiménez Gaona, en conferencia de prensa al terminar inesperadamente la reunión.
El acuerdo planteado por el Gobierno tiene como condición que al menos el 50% de la carga sea transportada por paraguayos. Pero según el Ministro, el problema y la tensión de los camioneros no consisten en los bitrenes, sino en los precios de los fletes. A este último punto no se llegó en la reunión, afirmó.
“Nosotros nos hemos ofrecido como mediadores entre los camioneros y los que pagan los fletes para que garanticen un precio que les sea rentable (a los transportistas) y justifique la inversión en equipos modernos”, subrayó el titular de Obras Públicas.
Por lo pronto, el Gobierno mantuvo su posición en permitir el ingreso de los bitrenes en el Norte del País de forma experimental para ver cómo se desarrolla la economía local. Los camioneros seguirán de huelga, expresaron los distintos gremios.