La embajada de Estados Unidos en el Líbano se encontró hoy rodeada de manifestantes por la decisión del presidente Donald Trump de reconocer Jerusalén como la capital de Israel. Se van ampliando las zonas de tensión en Oriente Medio.
La crisis y la violencia llegaron también al Líbano y aumentaron cuando se quemaron neumáticos y contenedores de basura durante las protestas próximas a la sede diplomática de Norteamérica. La Policía local lanzó gases lacrimógenos y los equipos de la Defensa Civil implementaron caños de agua para dispersar a los manifestantes
Los asistentes portaban banderas de Palestina y del Líbano, quienes quemaron a su vez una imagen de Donald Trump. En la protesta había miembros de grupos islamistas y de izquierda del país anfitrión, así como también militantes de partidos políticos.
Israel y el Líbano mantienen una tensa relación a causa del grupo terrorista Hezbollah, que ahora forma parte del Gobierno del país. Ambos protagonizaron una guerra en 2006, cuando el país de origen judío invadió a su vecino del norte para frenar los ataques de la guerrilla.
Fuente: Infobae