El pasado lunes, la Junta Municipal de Asunción, en sesión extraordinaria, aprobó el aumento salarial de G. 34.000 millones para funcionarios contratados, nombrados y jornaleros.
Carlos Arregui, concejal capitalino (PDP), quien votó en contra de la propuesta, criticó la determinación del legislativo municipal, ya que se realizó un aumento de forma indiscriminada, cuestionando que cuando se aprueban este tipo de proposiciones “se está beneficiando también a gente que no tiene nada que ver con la Municipalidad de Asunción”. “Hemos recibido decenas de denuncias de empleados de la Comuna que aseguran que ‘pseudocompañeros’ perciben el doble y hasta el triple en comparación a sus sueldos sin aportar absolutamente nada institucionalmente, yendo a ‘trabajar’ a campañas políticas fungiendo de operadores de varios colegas míos en la Junta”, repudió.
“Ya el año pasado se había aumentado un incremento de G. 23.000 millones. Ahora tenemos que explicar a la ciudadanía el por qué de estos G. 34.000 millones”, aseveró.
Afirmó que se ha sacado un crédito de G. 60.000 millones “que es para un déficit temporal de caja”. “Si bien es cierto, ellos (los que aprobaron la suba) dicen que esto es un ejercicio que se hace en los primeros meses del año, que son los de más alta recaudación, se dejó como garantía de ese crédito los bonos que hemos sacado para inversiones, lo cual es muy riesgoso realmente”, manifestó.
Citó que este año ya se han emitido bonos de G. 100.000 millones para inversiones y que para el 2018 se anuncia otra emisión de bonos de G. 70.000 millones. “Lo que yo cuestiono es la calidad en lo que se gasta el dinero de los contribuyentes”, señaló, criticando que en cuanto a los aumentos “aquel planillero sea recategorizado igual que uno que sí trabaja. Es desmoralizador”.