El juez penal de Garantías Humberto Otazú tiene desde hace seis meses el pedido de extradición de la justicia de los Estados Unidos contra Nicolás Leoz, acusado de presuntos hechos de corrupción y sobornos en el marco de la red FIFAgate.
En contacto con La Unión R800 AM, el magistrado explicó que el retraso se debe a que él estuvo interinando otros juzgados, por lo cual ha hecho que se dilate el proceso “por el recargo de trabajo”. No obstante, considera que se obtendrá en poco tiempo una resolución al respecto.
Señaló que el análisis que realizará tanto el Ministerio Público como la defensa del acusado sobre el documento de pedido de extradición por parte de la justicia estadounidense es acerca de “cuestiones formales”. “Nosotros no nos expediremos sobre la cuestión de fondo, es decir, si el ciudadano Nicolás Leoz es inocente o culpable de los delitos que el gobierno norteamericano está sosteniendo contra él. Lo único que nosotros vamos a hacer es si el estudio formal y ver si la solicitud de extradición está acorde al tratado y si existen los flagelos por los cuales se lo acusa tanto en Estados Unidos como en Paraguay. Sobre eso, se decide si se concede o no la extradición”, explicó.
Actualmente, el expresidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL) Nicolás Leoz se encuentra bajo arresto domiciliario, en razón de su avanzada edad (tiene 88 años) y en dando así cumplimiento con lo dispuesto por el Código Procesal Penal, expuso. En ese orden, en caso de ser hallado culpable por los Estados Unidos, no le exonerará de ser enviado a prisión.
Entre los delitos por los cuales la Justicia de Estados Unidos acusa al exdirigente deportivo figuran soborno privado, asociación criminal, lavado de activos y fraude a través de medios informáticos. “Los cuatro tipos penales, según Estados Unidos, los cometió en reiteradas ocasiones. Por eso, todas las causas juntas por las que se lo sindica son entre 40 a 50 cargos”, detalló Otazú.
No hay plazo para que el juez se expida sobre el requerimiento estadounidense.