Andrés Silva, director ejecutivo de la fundación, destacó el aporte de la ciudadanía para con Teletón, aseverando que, de no haber tenido su acompañamiento, difícilmente se hubiera llegado a la 10ª edición de la mayor colecta solidaria a nivel nacional.
Indicó que la recaudación del evento representa el 80% a 85% del presupuesto anual de la fundación, por lo cual el acontecimiento es muy importante. “Es medular. Nos jugamos en 27 horas la posibilidad de sostener los servicios durante un año más”, afirmó en comunicación con La Unión R800 AM.
En ese orden, manifestó que para llegar a esta 10ª edición de Teletón se debió realizar un financiamiento durante el último mes, asegurando que “es tan grande la lista de espera, la necesidad y la demanda que hay, que el crecimiento que tuvimos que tener fue realmente vertiginoso”. “Es muy difícil decirle que no a familias que vienen de lejos y llegan hasta nuestra fundación encontrando esperanza, entonces tratamos de hacer lo que está a nuestro alcance y mucho más para dar siempre respuestas”, añadió.
Silva instó a la ciudadanía a ayudar un poco más de lo que colaboró el año pasado, mencionando que “si el año pasado pudieron donar G. 5.000, envíennos esta vez G. 7.000. Si lo hicieron con G. 15.000, mándennos ahora G. 20.000. Les pedimos por favor porque todos los aportes individuales sumados representan el 70% de la meta”.
En efecto, para las donaciones individuales están habilitadas las cuentas del Banco Itaú, cajeros automáticos de la Red Infonet, la página web de Teletón y a través de Tigo Money.
Manifestó estar un tanto preocupado debido a la “gran polarización social”, ya que “este año hubo demasiados eventos que dividieron a la sociedad paraguaya. Está bien que tengamos diferencias, pero es importante ver aquellas cosas que nos unen, que a fin de cuentas son muchas más”. “La niñez paraguaya debe estar por encima de cualquier diferencia que podamos tener”, expresó.
Garantizó que, como cada año, Teletón rendirá cuentas ante la ciudadanía sobre los gastos e inversiones realizados.
“El problema no es la discapacidad, sino la falta de oportunidades”, expresó.