Mauricio Ossola, un abogado de 23 años, residente en la Provincia de Salta, Argentina, se casó con su tía abuela de 91, de nombre Yolanda Torres, quien al año siguiente falleció. Después de la muerte de su esposa, el joven comenzó con los trámites en la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) en reclamo de la entrega de una “pensión” que cobraba la señora, que era docente jubilada. Sin embargo, el organismo puso en duda la legalidad del matrimonio y rechazó la solicitó.
“Si tengo que ir hasta la Corte Suprema de Justicia, lo voy a hacer, porque el rechazo a mi petición es infundado y no voy a traicionar la última voluntad de Yolanda ni el juramento que le hice”, aseguró Ossola, el sobrino nieto y al mismo tiempo viudo de Yolanda Torres, quien murió en abril de 2016. “Yo amaba a Yolanda de la manera más pura en que se puede amar a alguien”, manifestó.
De acuerdo a lo publicado por el diario El Tribuno de Salta, Mauricio Ossola y Yolanda Torres se casaron “en un discreto matrimonio civil”, según lo explicado por el joven letrado, quien sostuvo que su matrimonio “fue una decisión noble y legítima”.
“Ella fue un soporte importante en mi vida y esa fue su última voluntad”, dijo el abogado en una entrevista con el citado diario salteño.
Ossola vivía desde 2009 en una casa de una localidad llamada Tres Cerritos, Provincia de Salta, con su madre, su hermano, su abuela y la hermana de esta, su tía abuela Yolanda, con quien finalmente contrajo nupcias.
El joven abogado junto a su tía abuela y esposa.
El hombre explicó que, como no alcanzaba el dinero en la casa, él estaba dispuesto a abandonar sus estudios, pero Yolanda le insistía en que tenía que recibirse y le decía que ella iba a ayudarlo para ese objetivo. “Pasado un tiempo, le pregunté qué le parecería a ella si le propusiera que nos casemos”, contó.
Cuando a mediados de 2016 Ossola comenzó a tramitar la pensión, la ANSES envió trabajadores sociales a su barrio para realizar un informe socioambiental que, entre otras cosas, determinó que los vecinos no tenían conocimiento del vínculo matrimonial de él con Yolanda. En ese contexto, el área de Asesoría Jurídica del organismo estatal rechazó la petición.
El joven abogado aseveró que su tía abuela y al mismo tiempo esposa “con más de 90 años tenía una lucidez asombrosa, pero ignoraba las cuestiones de Derecho y quería estar completamente segura de que nuestro matrimonio no tendría ningún vicio de ilegalidad”.
Sobre el punto, advirtió que luego de la polémica que despertó su caso “el Congreso argentino siempre puede, si es que quiere, mejorar las leyes”.
Con información de Infobae.