En su objetivo de luchar contra el Estado Islámico, el presidente ruso Vladimir Putin decidió aliarse con otros terroristas y antiguos adversarios de la Unión Soviética: los talibanes de Afganistán, una facción político-militar fundamentalista islámica.
Rusia y los talibanes afganos comparten el objetivo de hacer frente al Estado Islámico (ISIS) e intercambian información para ese fin, aseguró este miércoles el representante especial de la presidencia rusa para Afganistán, Zamir Kabúlov.
“Los intereses de los talibanes coinciden objetivamente con los nuestros. Ya había dicho que tenemos canales para compartir información”, respondió Kabúlov a la pregunta sobre si es posible cooperar con los fundamentalistas religiosos afganos para luchar contra los yihadistas del ISIS.