El precandidato a la Presidencia de la República por el movimiento Colorado Añeteté (ANR), Mario Abdo Benítez, visitó los estudios de Venus Media este jueves para hablar acerca de su campaña electoral, sus propuestas, la coyuntura política actual y su visión personal acerca de algo que siempre se le cuestionó: el stronismo.

Primeramente, con relación a la elección de Sandra Quiñónez por parte del Poder Ejecutivo para ocupar el cargo de Fiscal General del Estado, la calificó de “excelente persona”. No obstante, cuestionó el proceso mediante el cual el Consejo de la Magistratura terminó seleccionando la terna, que fue enviada posteriormente al Presidente Cartes.

En cuanto a su campaña, señaló que su candidatura “está muy bien posicionada en las encuestas”, afirmando que cuenta con una diferencia a favor del 15% a 20% por sobre su principal contrincante. Considera que “ya es irreversible” que se produzca una victoria suya el próximo 17 de diciembre, “salvo un enorme error que yo cometa en estos restantes 60 días o un gran fraude en las votaciones”. Sobre el punto, en caso de que se concrete una victoria suya el próximo 17 de diciembre, aseguró que buscará la reconciliación dentro de su partido, dejando en claro que no lo hará “bajo pactos de impunidad”.

De ocupar el cargo de Ejecutivo, garantizó que no respaldará la reelección presidencial, asegurando que “sí pensaría en esa figura, pero no para mí”. “En primer lugar, porque yo siempre estuve en contra de la reelección, lo estuve cuando la pretendieron Nicanor Duarte Frutos, Fernando Lugo y Horacio Cartes. ¿Cómo voy a estar en contra de algo que yo mismo me puse como principio? ¿Dónde estaría mi coherencia?”, refirió, añadiendo que “estoy convencido de que se debe construir una conciencia jurídica en el Paraguay”.

Continuando en su exposición acerca del tema, Benítez señaló que cree en el debate de la Constitución Nacional “en el que en ningún artículo le tenga que beneficiar al gran convocante, que es el Presidente de la República, sino en el que las modificaciones que se deseen realizar en nuestro contrato social tengan como inspiración el futuro del Paraguay y su gente”. En este sentido, manifestó estar a favor de cambios en la Carta Magna, y que, luego de realizarse, recién allí plantear la figura de la reelección, subrayando que “deberá ser para el próximo que ocupe el cargo del Ejecutivo”.

El precandidato a ocupar el sillón presidencial aseguró que uno de sus principales ejes como gobernante será el de “dignificar al funcionariado público”. “Lastimosamente se le ha metido en la misma bolsa a todos los funcionarios públicos, cuando bien sabemos que también hay empleados buenos”, señaló, agregando que devolverle el respeto a este sector generará “un Estado eficiente y dinámico”.

En referencia a Alfredo Stroessner, afirmó que tiene “los mejores recuerdos en términos personales, no puedo negar que los recuerdos que yo tengo hacia su familia son los mejores”. Sobre el tema, manifestó que siempre se ha cuidado en hablar de quien estuviera al frente de nuestro país por casi 35 años (1954-1989), ya que entiende el sentimiento que le genera a mucha gente la figura del dictador. “Yo siempre he hecho un mea culpa”, aseveró, citando la frase que expresa que “uno no elige dónde nacer”, aunque aclaró que no reniega su origen. En este punto, aseguró estar orgulloso de su papá, también llamado Mario Abdo Benítez, quien fuera secretario privado de Stroessner. “Para mí fue un hombre noble y un ejemplar padre de familia”, expresó, añadiendo que el asunto del stronismo le han cuestionado incontables veces desde que activa en política.

Manifestó que, por el momento histórico que vivió el Paraguay, se realizará un juicio justo sobre esa etapa de nuestro país “cuando no haya más estos apasionamientos ni a favor ni en contra”. Estima que “un proceso de 50 años” se necesitará para hacer una lectura objetiva sobre lo que dejó Stroessner cuando estuvo en el poder.

En contraste, expresó que con mucho orgullo hoy en día forman parte de su equipo personas como Eduardo Petta, precandidato a Gobernador por el Departamento Central, cuya familia estuvo exiliada por 27 años durante el stronismo. En el mismo sentido, mencionó a Blanca Ovelar, precandidata a senadora por su movimiento cuyo padre fue perseguido político, y Juan Ernesto Villamayor, apoderado de Colorado Añeteté, quien estuvo en prisión durante la misma época. “Nos unimos en el espíritu de mirar hacia el futuro y no al pasado, de reconciliarnos y cicatrizar heridas con el objetivo de encabezar un proceso que sane a la nación paraguaya”, afirmó el postulante a la Presidencia.

“Yo no hago política por rencores, sino por una conciencia institucional”, aseveró, añadiendo que el pueblo colorado lo ayudará “a reconstruir la política con una visión diferente”.

A continuación, la entrevista completa en el programa Buen Día Venus de Venus Media.

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