“Desde que se instaló la Fuerza de Tarea Conjunta llamativamente han aumentado los secuestros, especialmente contra los menonitas”, fue lo que criticó el presbítero Cristian Paiva, cura párroco de Santa Rosa del Aguaray y quien fue uno de los primeros en hacer uso de la palabra. En el mismo orden, afirmó que tienen sospechas de que el dinero destinado a la FTC “no llega a los miembros que están trabajando en esta zona”. Exigió al Gobierno central que tenga la voluntad política para buscar “la forma para liberar a los cinco secuestrados”.
Por su parte, lamentó el intendente de Santa Rosa del Aguaray, Esteban González, que “cada lágrima derramada por las madres de los secuestrados es como un puñal directo al corazón”, durante la Marcha. En contrapartida, expresó su esperanza de que el próximo encuentro sea para celebrar la liberación de los secuestrados.
Foto: Twitter @javierpanza.
La madre del suboficial de policía secuestrado por el EPP Edelio Morínigo, doña Obdulia Florenciano, pidió encarecidamente a los miembros de la agrupación insurgente por una prueba de vida. “Por favor queridos compatriotas que tienen a mi hijo secuestrado, denme una prueba de vida para al menos dormir dos horas”, clamó la mamá del agente, quien se encuentra privado de su libertad desde hace más de tres años. Además, pidió a la ciudadanía en general que no estereotipe a los norteños paraguayos.
Doña Obdulia Florenciano, madre del secuestrado Edelio Morínigo, expresando sus sentimientos y reclamos al Gobierno. Su hijo lleva más de tres años secuestrado por el EPP.
“He llorado todos los días, pero con llanto no soluciono nada, debo luchar”, manifestó. “Ñande ñande kuatia vai, no somos criminales, somos gente trabajadora”, enfatizó.
“No podemos permitir que un grupo criminal imponga su ideología con la violencia. Esto tiene un condimento político. Si quieren instalar eso, que lo hagan pero con los votos, no con la violencia”, repudió Luis Villasanti, presidente de la Asociación Rural Paraguay (ARP).
Por su parte, Abrahán Fehr (padre) lamentó que hasta ahora no haya noticias de su hijo, ni haya resultados en la búsqueda. Agradeció el apoyo del pueblo paraguayo por el acompañamiento de lo que está sucediendo con su hijo.
Abrahán Fehr (padre), haciendo uso de la palabra. Su hijo lleva casi un año secuestrado por el EPP.
Así mismo, Liliana Urbieta, hija del empresario ganadero Félix Urbieta también secuestrado, imploró a los integrantes del EPP la libertad de su padre a casi un año de su secuestro.
Fidel Zavala, quien fue secuestrado por el EPP, pidió a las autoridades “que cumplan lo que alguna vez juraron”. En el mismo orden, instó a las personas a continuar manifestándose “nunca vamos a tener un Paraguay diferente con gente indiferente”.
La movilización de los norteños, de acuerdo al informe de los periodistas de La Unión Javier Panza y Celso Núñez, conglomeró aproximadamente 15.000 personas, superando ampliamente las estimaciones de la organización “Paz en el Norte”, cuya organización estuvo a su cargo.