La inauguración de la Posada “Emily” para niños, niñas y adolescentes en tratamiento contra el Cáncer en el Instituto Nacional del Cáncer (INCAN), del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social, está marcada para el lunes 25 de setiembre a las 10:30.
La construcción de esta posada fue posible por el apoyo de la fundación estadounidense “Manitos” conducida por Claire Nalley y Richard Nalley. El fin de esta organización es ayudar a los niños con Cáncer del Paraguay. En una visita del 2016, los esposos Nalley relevaron la necesidad de un albergue para los niños que reciben tratamiento en el INCAN y sus familias venidos de lugares lejanos del interior del país y con escasos recursos. Se comprometieron a levantarlo. Un año después, la promesa está cumplida.
UNIÓN DE FUNDACIONES
La fundación “Manitos” reunió los fondos necesarios mediante donativos de personas solidarias en Estados Unidos y estableció un convenio de trabajo con la Fundación “San Peregrino”, de larga trayectoria la ayuda a niños con Cáncer del Paraguay.
EL NOMBRE DE UNA NIÑA QUE AMÓ PARAGUAY
La posada lleva el nombre de Emily BigelowNalley, la hija de Claire y Richard Nalley, quién tuvo Cáncer y en esa etapa de su vida contó con los cuidados y el amor de una niñera paraguaya. Emily se apegó a ella y, por su intermedio, llegó a conocer los platos de la comida paraguaya, a hinchar por la albirroja y a pronunciar palabras en guaraní. Los esposos Nalley afirman que la construcción de la posada es una devolución de amor al Paraguay.
¿CÓMO ALBERGARSE?
El albergue en esta posada estará disponible para cada chico y un familiar de acuerdo a la recomendación de un médico tratante del Departamento de Hemato-oncología pediátrica del INCAN y la disponibilidad de espacio físico.
Conectado al hospital por un sendero con rampas, el edificio de dos plantas de la posada cuenta con una puerta de salida con el Ramal de la Ruta 2 Capiatá-Areguá. Tiene capacidad para albergar a ocho niños y sus padres mientras dure parte o todo su tratamiento en el INCAN. Cada caso excepcional será considerado en su particularidad con el objetivo de ayudar a la mayor cantidad de chicos que sea posible. Algunas familias podrán quedarse un solo día sin pernoctar pero encontrarán en su jornada un espacio para la alimentación y el descanso.
El uso de la posada será gratuito. Cada familia ocupará una habitación con dos camas y un ropero cada una. Compartirán con otros huéspedes cuatro baños, un comedor, una cocina, una lavandería, una sala de reuniones, la oficina de la directiva y un patio con un parque ecológico donado por Itaipú Binacional.
Un representante de la Fundación “San Peregrino” cumple horario de oficina de lunes a viernes de 7 a 4 de la tarde.
EL APOYO DE ITAIPÚ
La hidroeléctrica Itaipú ha contribuido también a la habilitación de esta posada con la donación de electrodomésticos como lavarropas, cocina, heladera y freezer, sabanas y frazadas a más del mobiliario. El parque ecológico se realizó con cubiertas usadas pintadas de colores, idea que contribuye a la eliminación de neumáticos como potenciales criaderos de mosquitos trasmisores de enfermedades vectoriales. Incluye también módulos para una huerta pequeña con un espanta pájaros cuidador. El espacio tiene además una variedad de plantas florales y árboles nativos.
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Información del Ministerio de Salud.