Este martes 15 de agosto de 2017, Horacio Cartes cumple cuatro años como Presidente de la República del Paraguay, restándole ya solo a su período anual.
El analista político Alfredo Boccia Paz, en comunicación con La Unión R800 AM, dividió en cuatro partes el gobierno del actual Ejecutivo, detallando: “En el primer año, arrancó con mucho ímpetu estableciendo como prioridades la llegada de la inversión extranjera, la lucha contra la pobreza y por la seguridad en el norte. En contrapartida, en esos mismos 12 meses, hubo un estancamiento económico porque se pagaron todas las obras públicas. Digamos que fue como un plazo de estudio entre la administración pública y la administración privada, que es de donde él venía”.
Para el segundo año, el analista señaló que resaltó el gobierno de Cartes en lo que refiere a infraestructura vial, aunque se estas obras se llevaron a cabo dejando de lado la expansión de los derechos sociales.
Boccia Paz indicó que el tercer año “fue bueno, porque se consiguió estabilidad y se desarrollaron políticas”, contraponiendo a los últimos doce meses, ya que afirma que se produjeron resultados impensados para lo que en principio eran las prioridades del gobierno cartista. “Ni disminuyó ni aumentó la inversión extranjera, al contrario, esta descendió”, refirió. Así mismo, aseveró que este último período estuvo muy contaminado por sus desgastantes pretensiones de reelección.
Estima que, para estos últimos 365 días, el presidente tendrá gran protagonismo. “Cartes continuará siendo el señor feudal de la política paraguaya en su última parte de gobierno y quizás tenga continuidad desde el Senado y la gerencia del mandato de Santiago Peña, siempre y cuando este gane”, expuso.
Por otra parte, aseguró que su principal fracaso se dio en el combate a la inseguridad, especialmente en la lucha contra el grupo criminal Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). “Esta agrupación tiene los secuestros más largos de los últimos veinte años y se dieron en este gobierno”, manifestó, agregando que también durante el mandato cartista incursionaron más que nunca las fuerzas del crimen organizado brasileño en nuestro país, como el Comando Vermelho y el Primer Comando da Capital (PCC).
“En definitivas, tiene obras y trabajos para mostrar, pero estos no acompañan con las cifras reales”, declaró, añadiendo que “si nos centramos en el Producto Interno Bruto (PIB), y parece un país que crece. Pero nos centramos en la calidad de la salud, educación e índices sociales, y vemos que solo se han estancado sino han empeorado”.
Aseveró que el Ejecutivo equivocó el camino en el objetivo de acabar con la pobreza a través de creación de fuentes de empleo con un proceso de “semiindustrialización” con capital extranjero. “Es un modelo que nunca va a dar resultado para disminuir la pobreza porque es demasiado vulnerable, ya que depende de cómo le vaya a los países vecinos, sobre todo al Brasil, para que nosotros podamos recibir los beneficios”, explicó, pronosticando que ese deterioro producido por estas determinaciones económicas afectará al próximo gobierno en lo concerniente a conflictos sociales y políticos.
En síntesis, con todo lo expuesto, el analista político Alfredo Boccia Paz manifestó que, al llegar al último año, el gobierno de Horacio Cartes “deja un sabor agridulce comparando con lo que prometía en su campaña”. “No ha sido la peor presidencia que hemos tenido, pero tampoco fue demasiado como destacarlo”, culminó.