La mayoría de los gobiernos del mundo los consideran como el principal peligro de la actualidad y la lucha para erradicarlo podría significar el inicio de una gran guerra mundial.
A principios de la semana, los medios de comunicación revelaron que el pasado 24 de mayo, ISIS irrumpió en la ciudad sureña de Marawi, en la isla de Mindano, Filipinas: Uno de los combatientes, se trepó al techo de una escuela y plantó la bandera de ISIS. Su bandera negra reza: “No hay más Dios que Dios”.
Desde entonces, la ley marcial fue declarada en toda la isla y hasta el momento, más de 100 personas han muerto durante los enfrentamientos entre los yihadistas y las fuerzas gubernamentales. De acuerdo con CNN, entre los caídos se encuentran 19 civiles, 11 militares, cuatro policías y poco más de 60 militantes. En general, la población permanece en un estado de pánico, de psicosis colectiva.
Los combatientes pertenecientes al grupo Maute, una organización musulmana armada, fue una de las primeras en mostrar su interés de sumarse a las filas de ISIS y de anunciar públicamente su lealtad al grupo terrorista originado en Siria. Ahora, se las arreglan para implementar nuevos mecanismos de lucha, para sembrar terror.
La información más reciente reveló que uno de los grupos armados instalados en la isla está usando a niños desde los cuatro años de edad para que se enfrenten al ejército de Filipinas y como protagonistas de sus videos propagandísticos, tal y como la han hecho en el Medio Oriente para demostrar su poderío o para advertir acerca de un nuevo ataque.
El medio árabe Al Jazeera obtuvo imágenes que demuestran la exhibición de los menores de edad. La mayoría de los combatientes filipinos son muy jóvenes, pero la evidencia recabada sugiere que incluso hay niños de tan sólo cuatro años de edad usados “como soldados en el frente de batalla”.
Maute se ha encargado de reclutar a más adeptos pequeños con la oferta de sesiones de estudio, los huérfanos son muy atractivos para ellos porque son vulnerables y no tienen protección, pues la mayoría de ellos perdieron a sus padres durante algún combate. Al Jazeera explica que los grupos armados del sur del país han usado a niños para los enfrentamientos durante décadas: “la mayoría fueron enviados a pelear por sus propias familias”.
Sin embargo, esta es la primera vez en décadas que los niños son empleados como “herramientas de propaganda” en contenido audiovisual. Un profesor de ciencias políticas dijo al medio árabe que los grupos armados usan el pretexto de la guerra contra el terror como una herramienta de reclutamiento.
En el caso específico de los Moros, la minoría musulmana más grande de Filipinas, ya que se sienten “deprimidos” social y económicamente en su propia tierra natal, entones resulta más fácil que decida unirse a los grupos terroristas.
Fuente: CNN EN ESPAÑOL