Tormentas dejaron este fin de semana al menos 14 muertos en el sur y medio oeste de Estados Unidos, mientras que regiones del este enfrentarían potenciales ventoleras y tornados el lunes, informaron las autoridades.
La alcaldesa de Canton, Texas, localidad situada a 95 kilómetros al este de Dallas, dijo que los muertos allí eran cuatro.
“Es desgarrador y triste por decir lo menos”, declaró la alcaldesa Lou Ann Everett a periodistas el domingo.
Un portavoz del Departamento de Manejo de Emergencias de Arkansas dijo que el mal tiempo había dejado al menos cinco muertos en ese estado sureño, fronterizo con México.
La Agencia de Manejo de Emergencias de Mississippi confirmó otras dos muertes, entre ellas la de un niño electrocutado en un sector anegado.
Las fuertes lluvias también afectaron al Estado de Missouri, en el medio oeste, donde se informaron dos decesos. De acuerdo a CNN, uno era el de una mujer de 72 años que quedó atrapada en su automóvil, el cual fue arrastrado por las inundaciones.
En Tennessee, una niña de dos años murió en un hospital de Nashville después de ser golpeada por un arco metálico de fútbol derribado por los fuertes vientos, según el departamento de policía de la ciudad.
El domingo en la noche, el Servicio Meteorológico Nacional indicó que continuarían las inundaciones en el este de Oklahoma, el norte de Arkansas, Missouri, Illinois e Indiana.
Las autoridades advirtieron que tormentas que potencialmente incluirían fuertes vientos, granizos y tornados podrían afectar a partes de la costa atlántica y del noreste de Estados Unidos el lunes en la noche y martes en la madrugada.
Con información de EL PAÍS.