Los Jinkis son dueños de la empresa Full Play y se encontraban prófugos de la justicia desde el pasado 28 de mayo cuando un juez negó la solicitud de exención para evitar ir a prisión. Esto, un día después de que la justicia de Estados Unidos capturara a siete altos funcionarios de la FIFA y puso bajo investigación a otros 14, tres de ellos argentinos.
Los empresarios se presentaron ante el juez Claudio Bonadio en los tribunales de Comodoro Py hacia las 7:30 am junto con sus abogados, según Telam.
Ahora deben someterse a un juicio de extradición hacia Estados Unidos, que los requiere por integrar supuestas confabulaciones para cometer los delitos de crimen organizado, lavado de dinero y fraude electrónico.
El pasado 9 de junio otro de los argentinos requeridos por la justicia, Alejandro Burzaco, ejecutivo de medios deportivos en Argentina y presidente de Torneos y Competencias, se entregó ante la justicia italiana.