En un comunicado, el presidente Pierre Nkurunziza dijo que recurrió a las donaciones después de que la comunidad internacional retirara su apoyo.
“El Gobierno invita a los ciudadanos patriotas convencidos de este noble principio a hacer una contribución voluntaria para apoyar los esfuerzos que ya realizan los amigos de Burundi”, dijo el gobierno en un comunicado publicado en su página oficial de Facebook.
Se incluyó un número de cuenta bancaria para enviar las donaciones.
Decenas de personas han muerto en las protestas en Burundi desde Nkurunziza dijo que se presentaría a un tercer mandato, lo que extendería su década en el cargo por otros cinco años.
En Burundi, el presidente tiene un límite máximo de dos mandatos, como parte de un acuerdo que ayudó a terminar la guerra civil étnica en el país. Los críticos del mandatario dicen que su intento de buscar un tercer mandato viola la constitución.
Sin embargo, el Tribunal Constitucional de Burundi declaró que Nkurunziza es elegible porque fue elegido por el Parlamento, no por los votantes, en su primer mandato.
Un intento de golpe de Estado fracasó este mes, pero las protestas continuaron en la capital, Bujumbura.
Los manifestantes, determinados a evitar su candidatura, salieron a las calles en la capital y se enfrentaron a las fuerzas de seguridad.
Más de 110.000 personas han huido a los países vecinos, según las Naciones Unidas, en medio de los temores por que Burundi regrese a un conflicto similar a la guerra civil entre las etnias hutu y tutsi que dejó 300.000 muertos.
La elección presidencial está programada para el 26 de junio.
La pequeña nación, en el centro de África, tiene una población de casi 10,4 millones de personas.