El hecho de que la caja negra indicara que uno de los pilotos quedó fuera de la cabina de mando y no pudo volver a ingresar aumentó las sospechas de los investigadores respecto a la causa que produjo el accidente del avión A320 en los Alpes franceses. La información fue revelada este miércoles por una fuente al diario estadounidense New York Times.
Un antecedente misterioso hace crecer la suspicacia sobre lo ocurrido con vuelo de Germanwings. Se trata de uno de los mayores misterios en la historia de la aviación. En octubre de 1999, un avión de Egypt Air que unía a Nueva York con El Cairo cayó en el medio del Atlántico y las 217 personas que viajaban a bordo perdieron la vida. Entonces, Egipto solicitó a los EEUU que se hiciera cargo de la investigación, que concluyó que el copiloto Gamil el Battouti, de origen egipcio, había provocado el accidente aéreo de manera intencional.
De acuerdo con el análisis estadounidense, el avión se vino abajo después de que dicho copiloto fuera reprendido por un ejecutivo de la aerolínea por tener una conducta sexual inapropiada. Aquel ejecutivo iba como pasajero en ese mismo vuelo.
El piloto Hatem Rushd del Boeing 767 advirtió así a Gamil que ése sería su último vuelo. El copiloto le respondió: “Éste será el último vuelo también para usted”.
Más tarde, cuando el piloto se levantó para ir al baño, Gamil tomó las riendas y, según las grabaciones, empezó a decir: “Tomo mi decisión ahora. Pongo mi fe en manos de Dios. Confío en Dios”. La repitió en árabe 11 veces, mientras desconectaba los motores de una nave que comenzó a dirigirse en picada.
as pesquisas de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) norteamericana añadieron que no había evidencia alguna respecto a problemas mecánicos del avión, que cayó cerca de la isla de Nantucket, Massachussets.
La NTSB informó en 2002 que el copiloto se encontraba solo en la cabina. Hay confusión respecto a qué ocurría con el piloto cuando el avión se precipitaba, pero la repetición de “confío en Dios” durante un minuto y medio “no es consistente con la reacción que se hubiera esperado de un piloto que ha encontrado una condición inesperada o incontrolada de vuelo”, decía el informe. Pero el misterio sigue vigente: nunca se pudieron develar a ciencia cierta las razones que llevaron a Gamil el Battouti a comportarse de ese modo.
La conclusión de la NTSB fue entonces determinante: la hipótesis de un accidente suicida provocado por el copiloto de la segunda tripulación del aparato es “la única explicación posible para esta catástrofe”.
Sin embargo, la investigación egipcia concluyó que se trató de una falla mecánica.