“Él y yo teníamos un acuerdo para reiterarle a la criatura los fines de semana, me dijo que le iba a llevar a su casa para que pase el día con él”, expresó la mujer muy consternada.
La mujer dijo que le explicó a la mediadora de la Defensoría de la Niñez Lourdes Bareiro que tenía una orden de restricción y esta de igual manera le pidió que firme el documento, argumentando que el padre solo tendría contacto con el pequeño y no con ella.
“Yo le dije yo no quiero que él me llame, que me mensajee, pero si le quiere ayudar a su hijo y si quiere verle yo por el bienestar de mi hijo le deje”, explicó.
Llorando sentenció, “Yo no tenía porque firmar, me duele mucho (..) él me dijo que mi hijo decía no me mates papá, no me mates papá”.