“Cuando mayor es la peligrosidad del delincuente, mayor debe ser mayor la legalidad y los estricto que debe ser el Estado en la aplicación de la Ley”, dijo Salaberry con respecto al rigor de los controles que deben imponerse a Jarvis para constatar la veracidad o alcance de sus expresiones.
En cuanto a las declaraciones del preso en donde se jactó de realizar aportes económicos para la liberación del secuestrado Arlan Fick y para la compra de equipos de inteligencia destinados a las Fuerzas de Tarea Conjunta (FTC), el abogado dijo que lo legal sería que se tengan documentos respalden los hechos. “Cuando vas a tratar con una persona, afina la punta del lápiz y apégate a la legalidad”, señaló.
Agregó que según entiende que existen fundaciones o cooperativas en la penitenciaría de Tacumbú -donde Pavão realizó múltiples mejoras- y dijo que se tuvo que hacer uso de ellas: “que sean cuentas claras y cuentas muy bien atendidas y apegadas a la trasparencia total”, considerando más que nada que la cantidad de dinero que maneja el reo son de origen irregular, según había declarado el mismo brasilero.
“Y si alguien va a aceptar donaciones, que acepten como se aceptan las donaciones al Estado y de quienes puedan probar la legitimidad del origen de esos fondos”, apuntó Granada. “No puedo castigar con la mano derecha y con la izquierda estar recibiendo dádivas de la persona que pretendo castigar”, agregó.