El Estado Islámico no detiene la barbarie. El grupo yihadista, que la semana pasada quemó vivo al piloto jordano Maaz al Kasasbeh, decapitó públicamente a un hombre acusado de haber practicado brujería.
Ante la presencia de una multitud, la organización terrorista ejecutó a la víctima en la zona rural de Aldbsa, un pueblo ubicado al oeste de Raqqa, una de las fortalezas de ISIS, según consigna Daily Mail.
No se pronunciaron mayores detalles sobre los supuestos delitos del hombre ejecutado. El Estado Islámico se limitó a señalar que su asesinato responde a presuntos actos de brujería.
La víctima era un hombre de unos 60 años, con una barba larga color gris, y cabeza calva.
En las imágenes difundidas por el propio grupo yihadista se puede ver al hombre escoltado por terroristas enmascarados armados con rifles de asalto.