La Dra. Casuso respondió: “Él nunca tuvo absolutamente ningún relacionamiento con el EPP”, ante la consulta sobre los insistentes rumores que vinculan a Pavão con el grupo criminal. Inclusive agregó que “la gente del norte” aportó de manera económica, logística y otro tipo de ayuda en la lucha contra el EPP.
En otro aspecto instó a los trabajadores de prensa a que “miren el otro pabellón y vean como otros 120 internos viven en una situación similar a la que ven acá (por la lujosa celda del brasilero)”. Pavão construyó una iglesia y una biblioteca -entre otras cosas- en el penal. Las construcciones mencionadas serían para ayudar a los internos que sufren de adicción. Las obras fueron resaltadas por la defensora.
Con tantos bienes aportados a la penitenciaría siendo el narco un recluso, las consultas de los medios se enfocaron en cómo consiguió tanto dinero para “repartir” en bienes dentro del penal.
La abogada se defendió alegando que el brasilero cuenta con varias empresas legales, sin embargo los cuestionamientos continuaron sobre el origen de los recursos y la defensora terminó reconociendo: “Obviamente él nunca dijo que fue santo, en sus épocas anteriores tuvo sus falencias pero ya cumplió con la justicia. Lo que lucró lo supo invertir y hoy genera lícitamente un montón de dinero, además da trabajo a más de 1.200 personas”, sentenció antes de cortar sus ánimos de responder las preguntas
Los lujos de Pavão
