El agente fiscal de la Unida Regional de Villarrica, Carlos Alvarenga imputó por los hechos punibles de acoso sexual, coacción sexual y tentativa de coacción sexual a Francisco Javier Bareiro y Gustavo Ovelar, sacerdotes católicos, designados al pueblo de Paso Yobái, donde presuntamente ocurrieron los hechos. Cuatro jóvenes habrían resultado víctimas.
El representante del Ministerio Público colectó suficientes elementos de prueba en las indagaciones iniciadas, tras la presentación de la denuncia. Además, solicitó la realización de evaluaciones sicológicas de los jóvenes, por profesionales del Centro de Atención a Víctimas de la Fiscalía, y un informe socioambiental de la zona en donde residían los afectados, en el mencionado distrito del departamento de Guairá.
Según la denuncia, presentada por la Congregación Oblatos de María Auxiliadora, en algunos casos los jóvenes eran invitados a ir a preparar las misas con los sacerdotes en diversas y lejanas zonas de Paso Yobái, debido a ello algunas noches se quedaban en la casa en la que residían los curas. También, en ocasiones y víctimas diferentes, les ofrecían bebidas alcohólicas, prometían regalos y dinero, a cambio de favores sexuales.
La congregación presentó la denuncia ante la Fiscalía, y al conocer la situación separaron de sus cargos a los sacerdotes. Los hechos se habrían registrado entre los años 2011 y 2013, respectivamente.